miércoles, 1 de mayo de 2024

Perspectiva parte 1

 La primera parte de esta historia que espero les guste mucho como estoy muy muy cansada mas rato le pongo las imagenes

Diana llegaba como siempre, entrando impune a la casa de Francisco. Eran amigos desde hace mucho tiempo, pero había ciertas tensiones entre ellos. Aun así, solo eran amigos. Cada uno tenía sus propias preocupaciones y ocupaciones.

Diana parecía una chica perfecta con una vida igualmente perfecta. Francisco a veces la observaba y no le parecía que ella estuviera pasando por problemas. No parecía estresarse, siempre bromeaba y decía cosas. Era una amiga a la que él apreciaba mucho. De hecho, sentía algo por ella. Aun así, pensaba que tal vez ella era inalcanzable para él, ya que parecía demasiado perfecta.

Por su parte, Diana miraba a Francisco cada vez que entraba impunemente en su casa. Él parecía un hombre común y corriente, un oficinista estresado que vivía cada día de su vida con agobio. Siempre sobreanalizaba todo y creía que tenía mala suerte. A pesar de eso, ella disfrutaba mucho de su tiempo juntos.

Sus días transcurrían normalmente como amigos, aunque de vez en cuando esa cierta tensión entre ellos se volvía incómoda y extraña.

Un día, como siempre, Diana entró en la casa de Francisco. Él le había dado una llave para que pudiera entrar cuando quisiera. Sin embargo, ese día era extraño. Diana se encontraba estresada. Al entrar a la casa de Francisco, se topó con una escena también fuera de lo común. Francisco la recibió con gritos e la recriminó por entrar a su casa de esa manera.

“Oye, Diana, está bien que vengas a visitarme, pero por lo menos toca. No seas así”, dijo Francisco mientras se levantaba rápidamente del sofá y escondía su teléfono.

“Entiendo que seamos amigos y todo eso, pero esas confianzas no están bien. De verdad, deberías tocar”.

Diana no estaba para esas cosas ese día. Había sido muy estresante para ella y no quería que su mejor amigo le gritara y la tratara mal. Su reacción fue extraña.

“Oye, tarado, si siempre vengo y nunca ha habido problema, ¿ahora qué demonios te pasa?” Ambos parecían molestos y por una tontería empezaron una discusión como nunca antes.

Los minutos pasaron y entre dimes y diretes, algunas cosas salieron a relucir. Los celos de Francisco por la vida "más fácil" de Diana o la arrogancia de ella al decirle a Francisco que él no sabía lo difícil que era su vida. Afirmó que desearía que estuviera en sus zapatos por unos días para que entendiera lo insensato de sus palabras.

Ambos siguieron peleando durante algunos minutos más. Después de decirse cosas hirientes, Diana le dijo que ya no eran amigos y se fue muy molesta de la casa de Francisco. En medio de la calentura de la pelea, él le dijo que era una idiota y que no quería volver a verla nunca más. Cerró la puerta con fuerza para que ella entendiera el mensaje.

Después del fuerte enfrentamiento, tanto Diana como Francisco estaban en sus respectivos hogares, refunfuñando y aún molestos por la discusión. Ambos deseaban que el otro comprendiera la situación real de sus vidas. Durante esa madrugada, mientras el mundo dormía, algo sorprendente ocurrió.

Sin previo aviso ni explicación, las almas de Diana y Francisco abandonaron sus respectivos cuerpos y comenzaron a flotar en el aire. Las almas se encontraron en un extraño limbo, confundidas por lo que estaba sucediendo.

¿Qué está pasando? ¿Dónde estamos? - preguntó Diana, desconcertada. ella no se habia dado cuenta que ahora solo era un alma sin cuerpo de hecho aquella era una situacion tan anormal y atipica que nisiquiera recordaba que ella y francisco estaban molestos el uno con el otro

No lo sé. estamos transparentes y en este espacio que habra pasado- respondió Francisco, también desconcertado y sin recordar siquiera el rencor

Después de un momento de desconcierto, las almas de Diana y Francisco fueron bruscamente atraídas la una con la otra, y en un instante despues de que ambas almas se tocaron salieron disparadas en direccion opuesta hacia el cuerpo del otro, se encontraron en los cuerpos del otro. Diana desperto al otro dia mirando su habitacion y sintiendose rara

Diana despertó al día siguiente en una habitación que le resultaba extrañamente familiar habia estado en ella cientos de veces, aunque todo se veía diferente desde la perspectiva de Francisco. Se sentó en la cama, sintiéndose rara, con la mente llena de preguntas como ¿porque estaba en el cuarto de francisco? ¿que habia sido ese sueño tan raro? ¿que estaba pasando?. Miró sus manos y su cuerpo, reconociendo que no eran los suyos. no habia ninguna duda de que algo habia pasado y ahora: se encontraba en el cuerpo de Francisco. habia visto y sentido mil veces sus manos y no habia duda de donde se encontraba

Francisco abrió los ojos y se encontró en una habitación que le parecía vagamente familiar. Aunque no la había visto en persona, sabía que pertenecía a Diana. Recordaba las historias que ella había compartido sobre su hogar. Se sentía extrañamente ligero, pero algo extraño en su mente le agregaba muchisimo mas peso algo que no era fisico si no mental

Se sentó en la cama, observando la habitación sorprendiendose y pensando por un momento que esa no era la habitacion de diana, habia mucho desorden ropa tirada por aqui y por haya, un desorden que no parecia ser de la diana que el siempre miraba, pero se dio cuenta que si era su habitacion cuando vio tirada la ropa que traia puesta el dia anterior. ahi estaba en el suelo como si simplemente se la hubiera quitado como si no importare. Se dio cuenta de que estaba en el cuerpo de Diana y algo que el no noto de inmediato pero que si era obvio despues de ver la ropa tirada en el suelo, estaba en ropa interior,. Recordó las tensiones que habían existido entre ellos y cómo habían intercambiado palabras hirientes el dia anterior. Ahora, tenía la oportunidad de ver la vida de Diana desde su perspectiva.

Francisco se levantó y comenzó a explorar la habitación. Observó los detalles que antes no había notado: los colores de las paredes, los objetos personales en el escritorio, la ropa tirada por el suelo Cada elemento parecía contar una historia sobre la vida de Diana una historia que era contraintuitiva pues señorita perfecta parecia no serlo tanto mientras en su vida normal parecia muy inteligente y ordenada su habitacion ponia otra perspectiva sobre ella una no muy buena o demaciado contraria a lo que ella intentaba demostrar.

Francisco observó su reflejo en el espejo, el rostro de Diana lo miraba de vuelta. Era como mirarse a sí mismo desde una perspectiva completamente nueva. Pero esta vez, algo en su interior cambió. A medida que contemplaba su imagen, comenzó a ver más allá de la belleza superficial y a notar una ironía sutil en la mujer que veía en el espejo.

Podía ver a través de los ojos de Diana su hermoso cuerpo, sus delicadas curvas, sus labios que lo volvían loco y sus ojos que lo hechizaban. Sin embargo, también podía ver algo más, algo que antes no había notado: una perspectiva completa y absolutamente diferente detrás de ese cuerpo hechizante. Podía ver a Diana rodeada de desorden y caos

En ese momento, una reflexión se apoderó de Francisco. Era irónico tener la oportunidad de estar en el cuerpo de la "pequeña señorita perfecta" y darse cuenta de que su vida no era tan perfecta como parecía. se dio cuenta de que ella era una hipocrita siempre sonriendo y pareciendo despreocupada y perfecta mientras en realidad parecia mas desordenada y caotica que su propia vida

Sin embargo, mientras miraba su reflejo, un pequeño sentimiento malicioso comenzó a crecer dentro de él. Una sonrisa retorcida se formó en sus labios. Pensó en cómo tenía el cuerpo de Diana a su merced, cómo sus órdenes y pensamientos eran obedecidos sin resistencia. Un sentimiento de poder y control se apoderó de él.

"Bueno, bueno, bueno, ¿qué tenemos aquí?", murmuró para sí mismo, dejando escapar un susurro cargado de ironía. "La señorita 'mi vida no es perfecta', siempre tan altanera, restregándome en la cara tu vida sin preocupaciones, tu vida 'fácil' y aun así quejándote de ella."

Francisco se perdió en sus pensamientos oscuros mientras seguía mirando su reflejo. Se dejó llevar por el poder momentáneo que sentía, explorando la posibilidad de controlar el cuerpo de Diana y ver hasta dónde podía llegar con ello. desafortunadamente para el. el telefono interrumpio su momento….

El tono agudo del timbre cortó a través de sus pensamientos, arrancándolo de su ensoñación temporal. Con un suspiro irritado, Francisco se acercó a la mesita donde yacia el telefono de diana habia escuchado ese tonito que ella tenia cientos de veces,. Lo recogió con cierta brusquedad, casi como si el dispositivo tuviera la culpa de haberlo interrumpido en un momento de autosatisfacción. del otro lado francisco escucho su propia voz.


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